GALLOS DE RIÑA

Hernán me deja un mensaje en el contestador:"Estoy saliendo para Punta del Este.Vuelvo después de los carnavales".¿Carnavales?.¡Sí!...18,19 y 20.Si no es Hernán -me digo- puede ser otro.Acudo a mi antigua agenda:Mariana Lagos."Deje su mensaje,lo llamaré a la brevedad". Intento con Soledad Estévez:"¿Para cuándo sería?".¡YA PELOTUDA...YA.!Me corta.Trato de tranquilizarme.Suena mi celular.Es Guillermina,la chilena amiga de Balboa, aquella que la tuve atada en Buzios, la hippie nostálgica,la que llamó desde Pamplona para decirme lo obvio.Ahora está en Panamá,trabajando para una petrolera con olor a Chávez. Quiere contarme algo importante.La escucho:"Aquí hay un tipo que me ofrece por 500 dólares la espuela del gallo de riña que Hemingway tenía en Finca La Vigía.Es un cubano de apellido Batista.Dice que es sobrino nieto de Fulgencio Batista.Me cuenta que su padre era dueño de los 5 gallos de riña más famosos de Cuba y que Hemingway tenía dos gallos colorados que siempre competían contra él.Yo no entiendo nada de esto.También me ofrece el primer número de la revista Mundo Gallístico que dirigió José Torres y una copia de la película El Gallo de Oro.Me habló de un señor Toribio,de que las espuelas más famosas son las de Colombia,de que en Panamá todavía la aficción por el deporte del pico y las espuelas es bastante importante...¿me sigues?...".500 dólares...Puede ser cualquier espuela.Dile que no."Perdoname pero ya se la compré.Te la quiero regalar.¿Por qué?."Por todo lo vivido en Buzios".Gracias.